VLAD TEPES

DRACULEA

Vlad III, más conocido como Vlad Țepeș (Vlad el Empalador) o Vlad Drácula (en rumano: Vlad Drăculea; Sighișoara, Transilvania; 1428/1431-1476/1477) fue príncipe de Valaquia entre 1456 y 1462. A menudo se lo considera uno de los gobernantes más importantes de la historia de Valaquia y un héroe nacional de Rumanía.

Fue el segundo hijo de Vlad Dracul, quien se convirtió en príncipe de Valaquia en 1436. Vlad y su hermano menor, Radu, fueron mantenidos como rehenes en el Imperio otomano en 1442 para asegurar la lealtad de su padre. Vlad Dracul y su hijo mayor, Mircea, fueron asesinados después de que Juan Hunyadi, gobernador regente de Hungría, invadiera Valaquia en 1447. Hunyadi colocó en el trono a Vladislao II, primo segundo de Vlad. Hunyadi lanzó una campaña militar contra los otomanos en el otoño de 1448, y Vladislao lo acompañó. Vlad irrumpió en Valaquia con el apoyo de los otomanos en octubre, pero Vladislao regresó y Vlad buscó refugio en la corte otomana antes del fin de ese año. Vlad fue a Moldavia en 1449 o 1450, y luego a Hungría.

Las relaciones entre Hungría y Vladislao se deteriorarían luego, y en 1456 Vlad invadió Valaquia con el apoyo húngaro. Vladislav murió luchando contra él. Vlad comenzó una purga entre los boyardos valacos para fortalecer su posición. Entró en conflicto con los sajones de Transilvania, que apoyaron a sus oponentes, Dan y Basarab Laiotă (que eran los hermanos de Vladislao), y el medio hermano ilegítimo de Vlad, Vlad el Monje. Vlad saqueó las aldeas sajonas, llevando a los capturados a Valaquia, donde mando a empalarlos (lo que inspiró su cognomen). La paz fue restablecida en 1460.

El sultán otomano, Mehmed II, ordenó a Vlad rendirle homenaje personalmente, pero este hizo capturar y empalar a los dos emisarios del sultán. En febrero de 1462, atacó el territorio otomano y masacró a decenas de miles de turcos y búlgaros. Mehmed lanzó una campaña contra Valaquia para reemplazar a Vlad con su hermano Radu. Vlad intentó capturar al sultán en Târgoviște durante la noche del 16 al 17 de junio de 1462. El sultán y el principal ejército otomano abandonaron Valaquia, pero cada vez más valacos abandonaban a Radu. Vlad fue a Transilvania a buscar la ayuda de Matías Corvino, rey de Hungría, a fines de 1462, pero el rey ordenó apresarlo.

Vlad estuvo cautivo en Visegrád desde 1463 hasta 1475. Durante este período, las anécdotas sobre su crueldad comenzaron a extenderse en Alemania e Italia. Fue liberado a petición de Esteban III de Moldavia en el verano de 1475. Luchó en el ejército de Corvino contra los otomanos en Bosnia a principios de 1476. Las tropas húngaras y moldavas lo ayudaron a que Basarab Laiotă (que había destronado a Radu) abandonara Valaquia en noviembre 1476. Basarab regresó con el apoyo otomano antes de fin de año. Vlad fue asesinado en la batalla antes del 10 de enero de 1477. Los libros que describen los actos crueles de Vlad se encuentran entre las primeras superventas en los territorios de habla alemana. En Rusia, las historias populares sugirieron que Vlad pudo fortalecer el gobierno central solo mediante la aplicación de castigos brutales, y la mayoría de los historiadores rumanos adoptaron una opinión similar en el siglo XIX. El escritor irlandés Bram Stoker se inspiró en él para crear su personaje del vampiro Conde Drácula, que daría origen a gran cantidad de películas. Una de sus descendientes fue Erzsébet Báthory, ‘la Condesa Sangrienta’.

Durante su vida, Vlad firmaba sus documentos en latín como Ladislaus Dragwlya, vaivoda partium Transalpinarum (1475). Su patronímico rumano Dragwlya (o Dragkwlya, Dragulea, Dragolea, Drăculea) es un diminutivo del epíteto Dracul, heredado de su padre Vlad Dracul, quien en 1431 fue admitido en la Orden del Dragón, creada en 1408 por Segismundo de Luxemburgo, rey de Hungría y posteriormente emperador germánico. Dracul, que en rumano significa «el Dragón», es una forma definida rumana, siendo -ul el sufijo de artículo definido (del latín ille) y la palabra drac, el sustantivo «dragón» (del latín draco). Hoy en día, la palabra drac ha adquirido en rumano moderno la connotación de «demonio» (la palabra para «dragón» ahora es balaur o dragon), lo que ha llevado a malinterpretar el apodo de Vlad como «demoníaco».

En cuanto a su apodo, Țepeș, el Empalador, proviene a su afición por el empalamiento como método de ejecución, aunque sólo le fue asignado póstumamente, en torno al año 1550. Antes de esto sólo había sido conocido como Kazıklı Bey (Señor Empalador) por los turcos otomanos que encontraron sus «bosques» de empalados.

Pulsa sobre el enlace de la wikipedia para leer más sobre VLAD TEPES


1404

GILLES DE RAIS

BARBA AZUL